¡Hola mi estimada audiencia!
Feliz y venturoso año 2023, les deseo 365 días productivos y diferentes, llenos de novedades y vivencias únicas.
Estuve en muchas actividades los últimos días del año y no me fue posible escribir una reflexión de fin de año lo último que publiqué era lo que pensaba inicialmente escribir el último día del año y finalmente fue la última de mis reflexiones del año 2022, el cerebro sí que es poderoso... los últimos días me mantuve alejada de redes y pantallas, y la verdad me sentí bien.
Hoy, finalmente me senté frente al computador y lo encendí *esos escapes también son necesarios* este diciembre entendí que lo mejor no se publica porque no tienes nada que demostrar, en años anteriores me desviví por hermosamente decorar una mesa solo para tomar una foto y subirla a mis redes, no entendía que los mejores momentos en familia se me iban mientras buscaba la mejor locación para la foto, o haciendo otras pequeñas cosas que hacemos los humanos para alimentar el ego; y el no haber necesitado hacerlo este año en el que solo me centré en el contacto de mi gente cercana me hizo sentir más centrada y madura, me sorprende revisar el teléfono y no encontrar selfies recientes.
Por otra parte, ayer leí que lo mejor que podemos hacer en año nuevo es dejar de hacer promesas y enumerar propósitos de año nuevo, y menos anhelando una vida diferente cuando no estamos dispuestos a cambiar nada en nuestra forma de vivir, los cambios son progresivos y dependen íntegramente de nuestra voluntad para producirlos; no son milagrosos ni independientes.
Entonces, lo que les puedo desear aparte de mucha salud y bienestar físico y emocional es VOLUNTAD, mucha fuerza de voluntad para perseguir sus meta y no descansar hasta materializarlas.
Les transmito parte de mi energía positiva, y un fuerte abrazo.