Mis pasiones: Amar, escribir y hornear. Mi Blog es mi mundo, mi espacio de reflexión, Mi diario personal, me dejo fluir a través de las palabras, aprendo de la cotidianidad, amo escribir y que ustedes lo lean.

viernes, 21 de enero de 2022

La paciencia

En un mundo tan acelerado la paciencia es un recurso escaso, nuestras rutinas cada vez son más cortas, hacemos todo lo posible por simplificar el tiempo, a pesar de todo, hay cosas que no logramos controlar, entonces vivir en un ritmo tan acelerado solo nos agota y nos agobia tanto que  terminamos desgatados y deprimidos.

 Los que nos dedicamos a crear contenidos reflexivos a través de nuestros escritos nos inquieta  el lograr mantener la atención del lector, y es justamente porque las personas prefieren ir al punto sin tomarse tiempo para el análisis, inclusive en la plataforma de youtube cuando un video es "largo"  pongamos 10 minutos como ejemplo y es una receta, la gente muchas veces en la descripción escribe, si no deseas escuchar el preámbulo, en el minuto 4:32 empieza la receta, o la explicaciòn, y así vamos repitiendo el comportamiento con todo lo demás, queremos una vida basada en resultados y omitimos el proceso, deseamos saber sin investigar, aprender sin estudiar, queremos ser exitosos sin esforzarnos "mucho".

Estamos presos en el inmediatismo, y para nosotros los que amamos escribir es un desafío llegar a una audiencia y mantenerla, asimismo, ésta actitud nos afecta en muchos otros aspectos de la vida, por que luego a la fuerza nos toca entender que hay cosas que tienen un proceso necesario, todo tiene un tiempo y en esos momentos no podemos saltarnos los pasos.

Las que hemos sido madres sabemos de paciencia, una vida necesita cuarenta semanas para formarse y no podemos pretender que no sea así, pues cada día y hora en el vientre son necesarios para el bebé, es la única manera de formarse sano y nacer sin contratiempos, así son algunos proyectos de vida, de trabajo, de pareja, tienen un tiempo y debemos respetarlo para que salgan bien, no se trata de ir muy rápido o dejarlo a la suerte, se trata de ir al ritmo que te permita aprender, disfrutar y llevarlo a término de manera satisfactoria.

Hoy en día todo nos empuja a la rápidez, a simplificar la mayor cantidad de cosas, a perdernos los detalles porque lo que nos interesa es el resultado, así dejamos de disfrutar todos los momentos.

Debemos trabajar mucho para rescatar la paciencia, cultivar esa capacidad para saber esperar, internalizar que todo tiene un ciclo natural que no podemos alterar solo por capricho, ser pacientes nos ayudará a superar los obstáculos y las  adversidades,  cada vez son más las personas que abandonan cuando ven que las cosas se complican, ésto  es producto de la inestabilidad emocional, la frustración y la intolerancia, por eso necesitamos estar en calma, buscar el equilibrio interno, trabajar la aceptación entendiendo que no todo lo podemos controlar, hay situaciones que se escapan de nuestras manos, aprende a disfrutar de ti, de tu vida, vive un día a la vez, sé que no es facil, les escribe una persona muy impaciente a quién la vida le ha dado muchas lecciones para que aprenda a esperar, me ha servido de mucho, enfocar mi energía en una actividades que me gustan y me distraen, escribir, leer, cada quien puede escoger la actividad que le guste.

Si logramos aprender a controlar la impulsividad de querer todo para ya,  estaremos mejorando en el arte de esperar y tolerar, así nuestra calidad de vida mejorará significativamente, porque lo que nos desespera o molesta de los demás es una proyección de aquello en lo que debemos internamente trabajar. 

Gracias por leerme, déjame en los comentarios con que has logrado aprender a ser paciente? que es lo que aún no logras controlar?

gracias.