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He estado leyendo sobre algo llamado el Sindrome del SAPO y porque debemos evitarlo en el entorno laboral, lo que he visto y entiendo es que no solo se limita al espacio de trabajo, pues en la cotidianidad de la vida nos podemos encontrar con personas que reunan esas cuatro características, en síntesis en este mundo hay sapor por doquier.
Entonces, una persona que tiene este síndrome sufre de Soberbia, Arrogancia, Prepotencia y Obstinación, a ese tipo de personas se les conoce como SAPO.
Éstas cuatro actitudes no son exclusivas de un entorno laboral, quien es SAPO, lo es en la calle, en la casa, en el mercado, como padre, esposo, hijo, porque éstas cuatro características son rasgos de su personalidad.
Hasta ahora, lo importante es saber identificar que es ser sapo para que no caigamos es esos comportamientos tóxicos que nos convierten en seres inflexibles e indeseables.
Para luchar con el síndrome del sapo solo debemos evitar lo siguiente:
1. No ser soberbio: No somos superiores a nadie, menos somos mejores que los demás, cada quien es como es, todos tenemos cualidades y defectos.
2. No ser arrogante: Todos tenemos los mismos derechos y privilegios, por lo tanto no podemos exigir lo que no damos ni pretender que los otros hagan por nosotros lo que nosotros no hacemos por ellos.
3 No ser prepotente: No podemos pretender imponer nuestro criterio, ni nuestra forma de hacer las cosas ante los demás, el respeto es la base de todo.
4. No ser obstinado: Con la terquedad no llegamos lejos, nuestra verdad no es la única que vale no siempre tenemos la razón, las ideas de los demás también son importantes.
No te conviertas en un SAPO, no permitas que un SAPO te domine, aprende a identificar a los sapos y alejate de ellos y si no puedes, no permitas que su comportamiente genere caos en ti.
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