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Escribir y leer nos ayuda a los apasionados de la letras a entender que ninguna opinión es una sentencia, que todo tiene una perspectiva y que cada una desde la cosmovisión de quien la tiene puede ser válida y aceptable.
Existen los matices, los grises, los degradés, las curvas, cada ser humano le imprime a lo que hace, dice o escribe su sello personal, éste puede ser coincidente con otro y llevarlo a que sea repetido por muchos, no obstante, eso no convierte esa opinión en verdad o mentira.
Mi opinión es solo mía, y con ella no pretendo convencer a nadie de que lo que digo es verdad, mi vida y mis reflexiones tienen fuente experiencial, y como a mi supongo habrán otras personas a las que le sucedan cosas similares, otras por el contrario podría vivir experiencias totalmente distintas y estar en desacuerdo con lo que digo y eso no convierte en falsa mi postura o valida la de ellos.
Lo rico de todo esto es que con las experiencias divergentes podemos aprender, enriquecer nuestro mundo, complementarnos, ampliar nuestro abanico personal de posibilidades, a mi en lo personal me gusta que me contradigan *con respeto por supuesto* porque eso me impulsa a cambiar el enfoque, y, considero que el modo más sano de avanzar y aprender es cambiando la perspectiva de las cosas, reconociendo que en alguna circunstancia podríamos estar equivocados.
Los seres humanos que logran desarrollar sus capacidades intelectuales tienen un gran poder: El discernimiento, ese que te permite analizar, desmenuzar, revisar un hecho e interpretarlo, y, poder sacarle el máximo provecho es una herramienta para no dejarnos manipular.
Discernir nos ayuda a entender que aunque muchas, millones de personas por decir una cifra pudiesen estar repitiendo y replicando la misma información eso no la convierte en una verdad, porque solo tu puedes analizar y concluir partiendo de tu experiencia, subjetividad y mediana objetividad cual sería la opinión más cercana a lo que tu conoces como la realidad, que por demás está decir es circunstancial.
En este mundo globalizado seguirán existiendo los medios, los gobiernos y las personas que con su poder intenten manipular el curso de las cosas, torciendo con discrecionalidad la opinión pública, no es mentira que existen laboratorios que construyen informaciones, las desvirtúan, las enmascaran, las exageran o las desaprecen a conveniencia, y, en el peor de los casos partiendo de algo falaz lo lanzan en las redes sociales para que sean repetido por tantos al mismo tiempo que las personas crédulas ya sea por ingenuidad o desinformación lleguen a replantearse si la información que reciben es real.
La única forma de romper con el cerco informativo, la manipulación mediática y la viralización de las llamadas fakenews es estar preparados para no dejarnos engañar, porque ninguna persona a parte de nosotros mismo tiene el poder de engañarnos si no lo permitimos.
En conclusión, les cuento lo que me funciona:
- No me quedo con lo primero que me dicen, investigo, leo, reflexiono, me cuestiono y cuestiono a los demás y no repito lo que no he comprobado. Hasta ahora esa es la mejor manera que conozco para mantenerme al margen de tanta mentira y desinformación.
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Gracias.
