Lo que he vivido en estos últimos días en los que he estado buscando un vehículo para comprar es que la gente inventa lo que sea para vender o convencer al otro de que haga lo que el quiera, me he decepcionado al ver como sin temor alguno publican ofertas engañosas, mienten sobre el bien que venden, exageran las bondades y minimizan o enmascaran las fallas.
No les importa mostrar algo que no es y que no va a durar mucho pues llegado el momento del encuentro, la realidad va a quedar al descubierto, hoy tampoco conseguí lo que estoy buscando, es realmente agotador, confieso que me he frustrado y desesperado, y luego me animo y me digo que tengo que seguir.
La reflexión es que pase lo que pase debemos ser y hacer la diferencia, evitar caer en los engaños para convencer a los demás, la honestidad y la transparencia son nuestra mejor carta de presentación.
