Esta es la primera entrega de algunos post, que estaré compartiendo con ustedes sobre liderazgo, tema que me apasiona y que con humildad digo he desarrollado desde diferentes aspectos, dado que fue el tema central de mis investigaciones recientes.
Todos somos líderes y no lo sabemos!!
Queremos influir positivamente en quienes nos rodean? si la respuesta es sí, necesitamos hablar un sobre el liderazgo, ya que aprendiendo como cultivarlo lograremos lo que nos proponemos con el apoyo de los demás, sin que estos se sientan obligados a ayudarnos, sino movidos por el impetu de trabajar en equipo para lograr el bien de todos.
Para comenzar, oportuno es decir que el liderazgo es la capacidad que tienen algunos “seres vivos” para influir en otros, y hago énfasis en esto porque no es una característica exclusiva de los seres humanos, ya que en el mundo animal este también juega un papel importante, mas sin embargo, en esta oportunidad voy a referirme al liderazgo del hombre y la mujer en el mundo moderno; en ese sentido y contrariamente a las opiniones que he recogido en diferentes disertaciones sobre el tema considero que los lideres se hacen, no con ello voy a negar que algunas personas nacen con ciertas capacidades, pero a mi juicio ser o no ser líder es cuestión de autoestima, me fundamento en el siguiente ejemplo: las personas somos desde el nacimiento como porciones de arcilla que estamos próximas a ser colocadas en el torno, ese torno por analogía son nuestros padres ellos van moldeando nuestro carácter y personalidad que puede convertirnos en personas seguras con la suficiente estabilidad emocional para dirigirnos a nosotros mismos y así adquirir la capacidad de dirigir a otros; o simplemente ser personas introvertidas que prefieren sentarse a esperar que otro le diga que camino seguir, y esto ocurre porque un padre castrador difícilmente formará un líder, en virtud de que el liderazgo se traduce en la libertad, si no nos sentimos libres internamente no podemos pretender influir en otros positiva o negativamente.
A mi juicio, un buen líder tiene que ser organizado, tener lo que conocemos como el don de la palabra, pues ésta es necesaria para comunicarnos con el resto del mundo y hacerle saber lo que pensamos, de manera tal que sea posible convertir ese criterio en la opinión de muchos sin la necesidad de imponerlo, a su vez, manejando bien las habilidades comunicacionales podremos responder con propiedad ante el surgimiento de cualquier interrogante; del mismo modo considero que para asumir una posición de liderazgo es necesario conocer nuestras propias limitaciones, tener visión de futuro, pero mas allá de los planes, debemos practicar la visualización en si misma.
En ese orden de ideas, pienso que el liderazgo es la forma en que alguien dirige, anima y apoya a una masa, pero dejando en claro que el hecho de ser jefe no significa ser líder, en consecuencia ocupar un puesto de responsabilidad no produce automáticamente liderazgo, dado que esto se puede quedar en lo estructural, es decir, en el ejercicio del poder; y aunque el poder es una parte del liderazgo, no es suficiente, allí hace falta ejercer la autoridad, sin embargo, todo es cuestión de perspectiva y lo que algunos interpretamos como autoridad moral, para otros es autoritarismo, entonces, concluyo que el liderazgo también es relativo.
Así pues el líder tiene una función clave que es la de dar visión, organizar, animar y motivar a las personas que forman parte de su entorno y lo más importante para mi es la capacidad para dar y recibir amor, ya que un líder que no se mueva por ese sentimiento no puede ser capaz de preocuparse por el bien de sus seguidores.
Entonces, de ti depende si asumes el liderazgo o no, por mi parte me repito constantemente que somos del tamaño de la circunstancia que se nos presente, así que lo propio es ser protagonistas de la historia y no espectadores pasivos que se sientan a esperar que la vida les pase por el frente.
"Liderar, no es dar ordenes, liderar es motivar a otros a que hagan lo que tu deseas por voluntad propia"
Johana