"La
paciencia es Amarga, pero sus frutos son muy dulces"
El arte de
saber esperar no es exclusivo de todos los seres humanos, algunos somos
impacientes por naturaleza, pero las mujeres..... Cuando somos bendecidas con
el embarazo, tenemos por fuerza que aprender a esperar, comenzamos a contar
nuestra aventura en semanas y así debemos perfeccionar el arte de saber que
todo llega en el momento justo, nuestros bebes deben tener un tiempo de
maduración y nosotras aunque queramos adelantar el tiempo
sabemos que en ese caso por el bien de nuestros bebes la espera vale la pena, y
por eso, nos hacemos expertas en el arte de tener paciencia.
Desde el
primer día que nos enteramos que seremos madres, empezamos a contemplar la idea
de que pasaran nueve meses, tres trimestres, cuarenta semanas antes de poder
disfrutar a plenitud de ese maravilloso momento del encuentro entre nosotras y
el nuevo amor de nuestra vida.
Eso ocurre
porque sabemos que la viabilidad de esa nueva vida depende de muchos factores,
entre los que destacan el tiempo para madurar y desarrollarse de forma compatible
con el mundo, es solo en ese momento cuando decidimos que esperar es la mejor
opción.