Mis pasiones: Amar, escribir y hornear. Mi Blog es mi mundo, mi espacio de reflexión, Mi diario personal, me dejo fluir a través de las palabras, aprendo de la cotidianidad, amo escribir y que ustedes lo lean.

martes, 13 de abril de 2010

La solidaridad: un deber ciudadano


He estado analizando e internalizando cuales son los valores perdidos que necesariamente debemos rescatar para reconstruir esta sociedad que hoy en día se encuentra tan fragmentada; y el primero que me salta a la memoria, sin duda alguna es la SOLIDARIDAD, esta sencilla palabra de once letras que es fácil de pronunciar pero díficil de practicar, pues su rival eterno el individualismo está haciendo estragos en el mundo actual, llenando nuestras vidas de emociones mundanas que nos impiden compartir con quienes tenemos al lado el privilegio de estar vivos!

Es por ello que  decidí hablar del tema y abordarlo holísticamente, púes, aún y cuando la solidaridad es un valor, trae consigo otros que se manifiestan cuando de corazón somos solidarios con nuestros congéneres; lo primero que debemos saber, es que significa, al respecto en internet hay cantidad de información, por lo que no haré definiciones, simplemente, esbozaré lo que para mi hace falta para que empecemos a pensar en colectivo y actuemos en función de un todo, de allí, mi insistencia en darle una visión integral al tema.

Es así como, según mi percepción, este valor podemos cultivarlo, toda vez que, se encuentra ligado a los sentimientos, y  aflora cuando tenemos la necesidad de colaborar con otras personas voluntariamente; cuando somos solidarios combatimos otros antivalores que actualmente flamean; por ejemplo la solidaridad no le da cabida a la indolencia; asimismo, lucha contra la indiferencia, por lo que debemos entenderla como un acto social, por tanto, cuando interactuamos en nuestro entorno y nos involucramos en la realidad social nuestra y de otros,  vamos cambiando nuestra visión, por una nueva que nos invite a luchar por un objetivo común que derive en trabajar unidos en función de nuestros ideales. 

En síntesis, somos los llamados a rescatar la SOLIDARIDAD, y eso lo lograremos forjando procesos de cambio que nos permitan luchar contra los demonios internos y externos, para así, propiciar en nuestro entorno inmediato el rescate de la conciencia que nos convierta en seres solidarios por excelencia, todo con el objeto de que esta pase de ser una virtud, a un valor inalienable e intrínseco del ser humano.

La realidad es Gris....y el Árbol de la vida es eternamente verde!!

jueves, 8 de abril de 2010

Decálogo de la honestidad: una reflexión necesaria




1. La persona íntegra vive lo que predica y habla lo que piensa.
2. La honestidad consiste en decir toda la verdad a quien corresponde, de modo oportuno y en el lugar correspondiente. Decir la verdad no implica ser irrespetuoso con nadie.
3. La persona íntegra, además, es auténtica. Hay coherencia entre lo que hace y lo que debe hacer, de acuerdo a sus principios. Vive auténticamente como un ser humano.
4. La persona que miente (por engaño, exageración, precipitación al hablar, etc.) se hace un daño a sí misma. La mentira es autodestructora; siempre se paga.
5. Mentir para dañar a alguien voluntariamente es una injusticia.
6. Ser justo es dar a cada uno lo suyo, lo que le corresponde; derechos, reconocimiento y gratitud.
7. La falta de integridad se quiere justificar diciendo que todos actúan así, o que es la única forma de salir adelante, es necesario vivir según los principios, aunque esto suponga ir “contra corriente”.
8. Ser honesto es ser transparente; Es necesario desprenderse de las máscaras que el ser humano se pone para defenderse, para ocultar sus inseguridades o miedos. El recelo, la agresividad, las apariencias, son algunas de estas máscaras.
9. Una falta de honestidad, de veracidad, es aparentar una imagen que no corresponde con la realidad. Por ejemplo, aparentar virtudes que no se tienen.
10. Preocuparse excesivamente por “el qué dirán”, aparte de mostrar inseguridad en uno mismo, es una falta de sencillez. También lo es justificarse o excusarse.
Que implica la honestidad en la familia:

  1. Tratar igual a los miembros de la familia, amigos y vecinos

  2. Democratizar las mismas reglas que se implementan en el hogar


    Portarnos adecuadamente, aún cuando estemos solos.

  3. Mostrar actitudes saludables: de alimentación, prevención de accidentes, adicciones a favor de otros y de uno mismo.

La honestidad una virtud?

Si investigamos en la web encontraremos acepciones que definen a la Honestidad como una cualidad humana que consiste en comportarse y expresarse con coherencia y sinceridad, y en función a valores como la verdad y la justicia, lo cual podría entenderse como tratar de vivir de acuerdo a como pensamos y sentimos, pero...que pasa cuando no somos  consecuentes con nuestros pensamientos, sentimientos y acciones? estaremos siendo deshonestos? deshonestos con los demás o con nosotros mismos?

En lo particular pienso, que cuando continuamente nos formulamos preguntas, somos capaces de  hallar las respuestas adecuadas a través de un proceso instrospectivo del ser, a propósito de ello, usualmente recuerdo una frase pronunciada en una ponencia a la que asistí....:"Preguntar es abrir la puerta a un torbellino".....y esto es totalmente cierto, por lo que invito a realizarnos esta pregunta esbozada en el párrafo anterior,  de forma tal, que encontremos la respuesta que más se adapte a nuestra realidad; comparto con uds. mi opinión: para mí ser honesto es ser auténtico, genuino en todos los aspectos, pero evidentemente, no podemos pretender parecer honestos ante los demás sí nos engañamos a nosotros mismos o peor aún  si engañamos a otros asumiendo una falsa honestidad, de ser así, solo construiríamos  una imagen vulnerable a la más pequeña tormenta, pudiendo llegar a utilizar escaleras de anime que tarde o temprano con el peso se van a destruir; y, eso precisamente es lo que hacemos cuando dedicamos parte de nuestro tiempo a burlarnos de otras personas haciendo alarde de virtudes que no tenemos.

 Evitando comportamientos como el descrito anteriormente, le daremos la bienvenida a la verdadera honestidad, púes, siendo honestos seremos congruentes con nuestras actitudes, esto es vital, ya que  no podemos pretender serlo, si no consideramos y/o respetamos los sentimientos de quienes nos rodean, y nos hacemos eco del silencio o de la burla para lastimar a otros, aquí debe prevalecer la máxima de: "no hacer a los demás lo que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros".

En ese sentido, es importante tener en cuenta que para ser verdaderamente honestos debemos ser sinceros y fieles a las promesas que hacemos, la palabra debe ser suficiente, ser honestos es comportarnos correctamente aunque nadie nos este viendo; no se trata de vivir desenfrenadamente porque otros no se van a enterar; No! se trata de ser justos y actuar desinteresadamente.

En fín, si somos honestos de verdad lograremos calar hondo en las personas, pero la verdadera honestidad, la demostraremos ante nosostros mismos, pues como dice Antoine de Saint Exupery en el principito, lo esencial es invisible a los ojos.


lunes, 5 de abril de 2010

Ética sin Moral?


Una pregunta que deberíamos hacernos: puede existir ética sin moral o viceversa? y para entenderlo y ser cápaces de explicarlo, primero debemos aclarar las acepciones; a tales efectos, me permito humildemente compartir con ustedes lo que para mí significa cada una de ellas:

 Por una parte la Moral está ligada a la sociedad, a las pautas y creencias que otros nos imponen, así pues, ésta se relaciona más con las reglas......la moral en muchos casos es la que nos obliga a actuar  de cierta manera, y por intentar cumplir con sus preceptos ,  hemos llegado a convertimos en personas con procederes solapados, los cuales  nos lleva a naufragar en un mar lleno de ambigùedades, todo en virtud, de que adoptamos actitudes que  no se corresponden con nuestro yo interior sólo por aparentar ser algo que a todas luces no sómos.

Es así, como de una forma u otra, nos hacemos victimas de la moral, o por el contrario de la falta de moral, ya que cuando actuamos en contra de nuestros principios, nos fallamos a nosotros mismos, y, debemos entender que nada hacemos asumiendo poses sólo para parecer mejores personas, intentando despertar admiración en terceros, cuando no somos capaces de mirarnos al espejo y sentir respeto y orgullo por lo que vemos.

Por otra parte la Ética aún cuando en ocasiones se le confunde con la moral, se relaciona con ella, pero su esencia es otra; la ética debemos entenderla como un concepto más íntimo del ser humano, su fundamento axiológico va ligado al sistema de valores que cada uno de nosotros lleva enraizado en lo más hondo, y , por ende ésta marca nuestras vidas haciéndonos responsables de las decisiones y victimas de las actitudes; en ese sentido, puedo decirles, que para mi, la ética es personal y la moral es colectiva, por lo tanto considero que aunque exista una moral establecida por la sociedad, será nuestro comportamiento el que determine si somos éticos o no; y es así como concluyo diciendo que a mi juicio la moral será inquebrantable en la medida que nuestros principios éticos estén bien definidos; y para ello debe existir una armonìa indisoluble entre ambas; pues la ética forma parte de la reflexión muy personal que cada uno de nosotros realiza de la moral, es decir, la moral es taxativa, mientras que la ética es interpretativa, por lo tanto el ideal es que ambas se complementen y nos demostremos que definitivamente no puede existir una sin la otra.

Recomiendo Leer dos posturas filosóficas en dos tiempos  distintos Aristoteles y Habermas, muy oportunas para hacernos reflexionar.

Autodescubrirnos para Desarrollarnos!

 Un ser humano es capaz de generar transformaciones internas, cuando transita por el intrincado camino del Yo! se despoja del ego y decide mirar hacia adentro, intentando encontrarle el verdadero sentido a su existencia; para ello es vital, conectarnos con nuestra alma y respiración, y con esta experiencia abrirnos al proceso de conocimiento que nos pondrá de frente a nuestras potencialidades.

Nosotros contamos con un numero ilimitado de capacidades que aún no hemos desarrollado; en ocasiones, nos convertimos en saboteadores de nuestro destino al limitarnos en pensamientos y eso no nos permite avanzar; me preocupa este tema, púes entendí que de nada vale hacer revoluciones  externas, si el ser, permanece intacto, y por ello necesariamente debemos entender que la verdadera trasnformación tendrá lugar el día que nosotros mismos decidamos cambiar; pero cambiar que? esa es la pregunta, y pienso que en la medida que elevemos nuestros niveles de conciencia, el panorama se tornará claro y por sí solo nos irá mostrando el camino a seguir.

domingo, 4 de abril de 2010

No basta querer cambiar, hace falta voluntad!


Si somos el reflejo de lo que hacemos, debemos reflexionar que con tan solo un ligero cambio en nuestro proceder, estaremos garantizando resultados diferentes; el meollo del asunto radica, en que no basta querer, desear, anhelar, no!!! no es suficiente.....los deseos, son sólo eso. Es entonces, cuando una vez más debemos mirar hacia adentro e internalizar lo que queremos, sistematizar lo que tenemos y diseñar como lo lograremos, todo esto, obviamente implica cambiar el cristal que utilizamos para observar el mundo, aceptando con humildad algún error que deba ser reparado para dar paso al nuevo camino; el secreto es autodescubrirnos e innovar nuestro espíritu y corazón, llenándolo de perspectivas e ideas distintas que nos conduzcan hacia el camino deseado; es aqui donde la autocrítica debe aparecer para ayudarnos a mejorar cada día, aplicándola seremos capaces de cuestionar nuestros juicios, de olvidarnos de las certezas, para dar paso a nuevos posibilidades.


Esto para algunos podría no ser fácil, ya que somos seres sociales que interactuamos en un entorno exageradamente complejo, y en algunos casos la sociedad nos corroe y nos obliga a actuar bajo ciertas condiciones, PERO HA LLEGADO LA HORA, de asumir el reto de transformar nuestras vidas, dejar que los prejuicios se muden de nuestro corazón, para que así podamos asumir el compromiso de cambiar, y, para lograrlo lo que hace falta es tener VOLUNTAD.

Cambia el cuerpo o cambia la mente?

Un agente de cambio es una persona capaz de aceptar, interiorizar y promover el cambio; en razón de ello debemos mirar hacia adentro, intentar escudriñar en el alma, y detenernos a reflexionar: que es lo que estamos haciendo??? contribuye eso a que nuestro mundo sea mejor? estamos actuando asertivamente para alcanzar los objetivos? nuestras actitudes generan efectos positivos en quienes nos rodean?
Esas son solo algunas de las interrogantes que nos debemos formular si pensamos transformar algo, no podemos tan siquiera imaginar que un mínimo esfuerzo contribuirá para que seamos mejores seres humanos; podemos cambiar el color del cabello, el estilo de vestir, pero si continuamos con la misma forma de pensar, haciendo del individualismo nuestra religión....dificilmente podremos alcanzar la tan ansiada transformación.

Construyendo un mundo Nuevo


Una y otra vez nos preguntamos, que es lo que pasa? que hacemos un gran esfuerzo y aún así no somos capaces de realizar un cambio que implique una transformación real, una que emerja de adentro hacia afuera, y tan contundente, que sea generadora de otros cambios; y la respuesta para mí es sólo una: CONCIENCIA esa que debe impulsarnos día tras día, en cada kilómetro recorrido, en cada actividad realizada; púes solo siendo conscientes de nuestra realidad, de nuestras virtudes, debilidades, capacidades y potencialidades seremos capaces de conducir a un puerto seguro a nuestro destino y el de la humanidad.
Son estas sencillas palabras que salen de mi corazón para compartirlas con cualquier alma de buena voluntad que sientas las mismas inquietudes que yo, sobre el futuro de nuestro planeta.